domingo, 17 de junio de 2012

Hay noches que la tristeza me invade...

Aprender a callar los dolores, también es una forma de vivir...

Hoy entre bromas esculpiste verdades como valles...

Tan cierto es lo que dices: "sólo yo quiero hacerte el amor"... tú no...

Tal vez sea egoísmo de mi parte, no lo sé...

Pero en honor a la verdad tengo tanto tiempo, demasiado tiempo, de sentirme castrado...

Siento que mi tiempo en los que decidía cuando, como y donde hacer el amor, ya no existen...

Pues aunque existan noches como hoy, en las que muero por hacerte el amor...

Tu ausente actitud, el desasosiego y tu desinteres por todo lo mío...

Me alertan, no seguir, no buscarte, ni siquiera intentarlo...

Por que además sé, que tu nunca me buscarás para hacerme el amor... 

Que tristemente platónico es vivir el amor así, noches como ésta...

Me recuerdan nuestra noche de bodas, el mismo cansancio, las mismas ausencias... de pasión...

Y aunque sé que no debería llevar como una cruz ese recuerdo, demasiadas de nuestras noches están calcadas con el mismo molde...

Y de nada sirve quejarme, tu no cambiarás y yo elegí tenerte en mi vida, hasta que mi corazón y mi cuerpo (que tan ausente de ti estan)... aguanten...

No hay comentarios:

Publicar un comentario